Cada 17 de octubre, el mundo conmemora el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, una jornada destinada a visibilizar la lucha contra la pobreza y a promover la dignidad humana.
La conmemoración del Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza se remonta al 17 de octubre de 1987. Ese día, más de cien mil personas se congregaron en la plaza del Trocadero, en París, donde en 1948 se había firmado la Declaración Universal de Derechos Humanos, para rendir homenaje a las víctimas de la pobreza extrema, la violencia y el hambre. Los allí reunidos proclamaron que la pobreza es una violación de los derechos humanos y afirmaron la necesidad de aunar esfuerzos para garantizar su respeto. Desde entonces, personas de toda condición, creencia y origen social se reúnen cada año ante estas placas para renovar su compromiso y mostrar su solidaridad con los pobres.
En 1992, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó oficialmente este día, marcando el inicio de una agenda internacional comprometida con la erradicación de la pobreza. Desde entonces, los gobiernos de todo el mundo han sido invitados a organizar actividades y políticas para combatir la indigencia, reafirmando la necesidad de un esfuerzo colectivo para garantizar que todas las personas puedan vivir con dignidad.
El Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza no es solo una jornada de reflexión, sino un llamado a la acción. Erradicar la pobreza no es únicamente una cuestión económica, sino una lucha por los derechos humanos y la justicia social. La pobreza, en todas sus dimensiones, debe ser entendida y abordada de manera integral, reconociendo cómo las distintas formas de violencia y dominación interactúan entre sí.
En este 17 de octubre, es fundamental renovar el compromiso con la erradicación de la pobreza, reconociendo la dignidad de todas las personas y luchando por una justicia social que incluya a los más vulnerables.
La UNESCO señala que la erradicación de la pobreza es un imperativo desde el punto de vista de los derechos humanos, el desarrollo y la paz.
En Argentina, según el INDEC, la pobreza para el primer semestre de 2025 fue del 31,6%, es decir, hay más de 15 millones de argentinos en la pobreza.

