El 4 de septiembre se celebra el Día Mundial de la Salud Sexual, con el objetivo de promover el bienestar físico, emocional, mental y social relacionado con la sexualidad.
Lo que se busca con la celebración es concientizar a la población acerca de la importancia de los derechos sexuales, la diversidad sexual, así como la salud sexual y reproductiva. Al mismo tiempo, divulgar información sobre los factores de riesgo, enfermedades de transmisión sexual y contagios, precauciones pertinentes para una vida sexual saludable.
En ese sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) define la salud sexual como un estado de bienestar físico, mental y social en relación con la sexualidad. Requiere un enfoque positivo y respetuoso de la sexualidad y de las relaciones sexuales, así como la posibilidad de tener experiencias sexuales placenteras y seguras, libres de toda coacción, discriminación y violencia.
Al respecto, Juan Carlos Márquez, integrante de la Asociación Civil "Promoción para la Salud de Jujuy", expresó que la salud sexual no solo tiene relación y vinculación con la vida particular de cada una de las personas, sino también con la vida social, “cuando uno habla de salud sexual hay muchas cuestiones que inmediatamente aparecen, no solo en nuestra imaginación, también comienza a aparecer en las políticas públicas”.
Al hacer referencia a las políticas públicas, recalcó que algunas fueron trabajadas durante mucho tiempo para instalarlas dentro de la agenda pública y otras que quedaron reticentes para cierta cantidad de población.
Consultado por las políticas públicas y su desarrollo, Márquez subrayó que “veníamos con una lógica de avanzada en cuanto a la decisión sobre cómo hacer que efectivamente haya salud sexual, lamentablemente muchos de los proyectos que se venían desarrollando quedaron en suspensión, algunos estancados y otros no se lograron desarrollar en todo el país”.

