Durante una entrevista con la agencia Télam durante el año 2022, el papa Francisco recomendó leer a Günter Rodolfo Kusch, un filósofo, antropólogo y dramaturgo argentino que dedicó su vida a investigar y a difundir los valores del pensamiento popular e indígena americano.
Kusch postuló un pensamiento que integró lo popular, lo andino y lo académico. Su obra es un intento por reencontrar al sujeto latinoamericano. A lo largo de su producción, abordó temas fundamentales como la cultura, el suelo, los símbolos, la vida, el saber, el pensar, la política y el pueblo, siempre desde una mirada descolonizadora.
El Lic. Daniel González, director del instituto Rodolfo Kusch, destacó las coincidencias entre el pensamiento del Papa Francisco con el de Rodolfo Kusch.
Sobre el tema, González explicó: "Podríamos decir que el Papa Francisco hizo famoso a Kusch fuera del ámbito filosófico argentino y un poquito más allá, porque él lo mencionó por primera vez en una entrevista con Walton, en la que estaban hablando y dice, 'Para entender bien el concepto de pueblo, y cuando hablo de pueblo, tiene que leer a Kusch' pero nadie sabía quién era Kusch en Europa, fue bastante curioso, él lo reivindicaba mucho".
Resistido por la academia y marginado en su tiempo por no aceptar las ideas que se intentaban imponer desde Europa, Günter Rodolfo Kusch (1922-1979) fue un filósofo, antropólogo y dramaturgo argentino que dedicó su vida a investigar y a difundir los valores del pensamiento popular e indígena americano.
La esencia de su línea de pensamiento radica en el hecho que, si se estudia con categorías alejadas de la propia realidad, se produce una dominación cultural que impide la necesaria emancipación de los pueblos.
González también destacó al Papa Francisco y a su constante búsqueda de marcos de referencia: "Creo que en realidad, también lo que Francisco reivindicaba, era la búsqueda de marcos de referencia, de conceptos ligados a nuestra realidad, porque lo que hay habitualmente en América Latina es una imposición de ideas sobre la realidad".
"Al contrario, Francisco insistía mucho, incluso uno de sus principios de acción es que la realidad prevalece sobre la idea, es aceptar la realidad, tratar de verla, entenderla, no es que estaba en contra de las ideas, pero si estaba en contra de que las ideas se impusieran, como una especie de recorte de la realidad".
Hay que recordar que Kusch se instaló en Maimará, con su esposa y dos herramientas fundamentales: un grabador y una cámara de fotos. Con éstas, se dedicó a escuchar al pueblo, dejando registro del riquísimo bagaje cultural que podía expresar desde la dueña de una farmacia, hasta un tejedor o un anónimo arriero. Es que para Kusch no se podía hacer filosofía sin ubicarla en un determinado entorno.
González explicó cuál era la gran preocupación de Kusch y también la del Papa Francisco: "La cultura como práctica, como ideas, como modelos, como acciones, pero no al revés, ésa era la gran preocupación de Kusch, pero no solo de él, por supuesto, tampoco es que sea extensa la lista de personas con este planteo, pero sí que también lo tenía en un grado el Papa Francisco, todas sus acciones están basadas sobre eso, en Kusch también, sin negar la formación, las ideas, los diálogos, porque Kusch era un filósofo con una muy buena formación académica".
"Kusch en vez de quedarse en repetir lo que decía la academia en este momento, se preocupó en ver que, de lo que había aprendido, cómo le permitía pensar a partir de lo que él veía, de lo que escuchaba, de lo que la gente hacía y que ahí había hay una riqueza en nuestro pueblo que es inmensa y que hay que tratar de descubrirla".
González también explicó cómo Kusch conoció a Bergoglio: "Estoy buscando estas coincidencias, de Francisco con Kusch, Kusch con Francisco, se han conocido aparentemente, porque el último grupo de trabajo al que pertenecía Kusch estaba referido a la Facultad de Teología de los Jesuitas y Bergoglio en ese momento vivía ahí también, al lado de la facultad".
Al ser consultado por si conoció a Bergoglio, el antropólogo González explicó: "Bergoglio siempre he sido un hombre muy valiente y muy consecuente, no llegué a conocerlo de trato, pero sí de conocerlo, siempre fue un hombre que se animó a pensar y a moverse más allá de los formatos tradicionales, sin dejar de ser un cura, en ese momento, obispo".
Por último, González reflexionó sobre el fallecimiento del Papa Francisco: "Creo que también ha sido un líder mundial que ha sobresalido en una época en las que hay pocos líderes mundiales que sobresalen por cosas buenas, o por sus capacidades, pero Francisco sobresale más allá del momento por la coherencia, entre lo que dice, lo que hace y lo que creía".
"Es un momento de mucha mediocridad, pero Francisco, su brillantez estaba en, insisto, en la coherencia, y que no había dobleces, decía la verdad y la vivía, puede haber distintas maneras de decir algo y de vivirlo por supuesto, pero su figura sí sobresale por todo eso".